La Basílica de Nuestra Señora de la Encina, destacada en un libro que recopila lo mejor del Camino de Santiago
La obra, editada por Hércules de Ediciones, está cofinanciada por la Xunta de Galicia dentro del programa O teu Xacobeo
La editorial gallega Hércules de Ediciones acaba de publicar “Lo mejor del Camino Francés”, una recopilación de los más destacados textos sobre la historia y la actualidad de las ciudades y paisajes por los que transcurre la ruta jacobea. Además, la obra, que está cofinanciada por la Xunta de Galicia dentro del programa O teu Xacobeo, se completa con una selección de fotografías espectaculares de la vía de peregrinación a Santiago por antonomasia, bajo la mirada de José M. Salgado. Contenido e imágenes evocarán las sensaciones experimentadas a los que hayan hecho el Camino y quieran recordarlo y ofrecerán una certera panorámica a aquellos que aún no hayan podido recorrerlo y quieran viajar a través de la lectura.
Así, entre los monumentos destacados en esta selección de lo imperdible del Camino se encuentra la basílica de Nuestra Señora de la Encina, en Ponferrada. “Desde cualquier lugar de la ciudad, si alzamos un poco la vista, aparece ante nosotros su rotundo campanario. Cuenta la tradición que la imagen apareció en el interior de uno de estos árboles, y hoy su basílica ejerce la misma función protectora que antaño había correspondido a la encina”, resalta el libro. De Ponferrada, también se ponen en valor otros monumentos como el castillo templario o la Torre del Reloj.
“Lo mejor del Camino Francés” muestra el itinerario por tramos, acompañando al lector desde las puertas del Camino en el Pirineo hasta llegar a Compostela por O Cebreiro, pasando por Puente la Reina, Santo Domingo de la Calzada, Burgos, Carrión de los Condes, León y Ponferrada.
Esta apuesta editorial es la primera entrega de una nueva colección de Hércules de Ediciones titulada “Lo mejor del Camino de Santiago”, que recogerá otras rutas jacobeas como la vía de la Plata, el Camino Portugués, el Camino Norte y el Primitivo, etc.
El Camino Francés
El llamado Camino Francés es el itinerario jacobeo por excelencia, que penetra por el Pirineo por dos puntos de gran significado histórico: Santa Cristina en el Sumus Portus —Somport— y Santa María de Roncesvalles, junto a Valcarlos, el valle de Carlos de semblanza carolingia en la estribación navarra de la cordillera. Este Camino Francés se afianza en la historia en el siglo X, con la alianza del rey pamplonés Sancho Garcés I con la monarquía astur-leonesa, y adquirirá con su sucesor, Sancho III el Mayor, un período de esplendor animado por las reformas que en el siglo XI se recogen en la cristiandad merced a la reforma de Cluny. El Camino de Santiago iba a ser en ese tiempo lo que se ha llamado la calle Mayor de Europa, medio de tránsito de gentes de distintas culturas, lenguas y mentalidades, dotadas de unidad espiritual que fraguaría en un denominador común en el ser, pensar y actuar de los europeos.
El nombre hace referencia al país que reúne y concentra en cuatro vías el conjunto de itinerarios europeos que por tierra se dirigen a Compostela. Es el Camino por antonomasia, una ruta de espiritualidad y cultura hasta el corazón de Galicia que hoy sigue siendo la principal ruta peregrina a Compostela. Tres de las cuatro vías francesas descritas ya en el Codex Calixtinus llegan unidas a Roncesvalles, en dirección a Pamplona y Estella. En Puente la Reina se les incorpora la cuarta, el Camino de Arlés, enlace principal con la Vía Francígena y la red de itinerarios jacobeos en Italia, que había entrado por Somport y Jaca. El Camino recorre a continuación un rosario de ciudades y localidades de vieja tradición jacobea: Logroño, Nájera, Santo Domingo de la Calzada, Burgos, Castrojeriz, Frómista, Carrión, Sahagún, León, Astorga, Ponferrada y Villafranca del Bierzo.
Entra en Galicia por la aldea medieval de O Cebreiro con el recuerdo del «Santo Milagro», y desciende a Triacastela, donde se bifurca. Una ruta baja por Samos y su célebre monasterio benedictino. La otra cruza más al norte, por una serie de pequeñas localidades de viejo sabor rural: San Xil, Montán, Pintín Calvor… Ambos itinerarios confluyen en Sarria, la villa mayor de este Camino en Galicia. Desde aquí continúan, ya unidos, por Ferreiros (Paradela), Portomarín, Leboreiro (Monterroso), Palas de Rei, Melide, Arzúa, O Pino y Lavacolla. Se llega a Santiago tras contemplar su panorámica desde el «Monjoi» o Monte do Gozo, hoy convertido en un gran complejo de acogida. Se entraba en la ciudad por la Porta do Camiño («Puerta del Camino»), hoy una bocacalle que sigue conservando el histórico nombre.