La Ponferradina bordea la crisis, empatando con el Sestao a un tanto

5.737 Espectadores acudieron hoy al Toralín para ver el partido que enfrentaba al equipo berciano contra el Sestao River Club.

Tras la derrota el fin de semana pasado en A Coruña, la Deportiva Ponferradina planteaba este partido como una forma de afianzarse en el liderato, sobre todo contra un rival que se encontraba en puestos de descenso.

Un partido que, a priori, parecía sencillo para la Ponferradina pero que no lo ha sido.

Una primera ocasión la tuvo en sus botas Ándoni López en un remate de falta que se marchó rozando el poste en el minuto ’16.

Pero más cuando en el minuto ’20 de la primera parte, Gaizka adelantó a los visitantes en un remate de cabeza a la salida de un córner.

Hasta ese momento la Ponferradina se mostraba mejor situada en el campo, con alguna llegada a la portería vasca que presagiaba que el prime gol berciano podía estar próximo. Pero tras encajar el gol visitante, a la Ponferradina le empezaron las prisas y los nervios.

Aun así, seguía bastante bien plantado el equipo en el terreno de juego y comenzó a trenzar jugadas para conseguir el empate, pero ninguna de ellas se convirtió en una clara ocasión para los bercianos.

Así se legaba al descanso con victoria visitante por 0 a 1.

Los primeros veinte minutos de la segunda parte fueron un querer y no poder, sin llegadas de la Ponferradina a la portería vasca, parecía dormirse el juego por momentos, algo que beneficiaba sin duda a los visitantes que no pasaba dificultades.

De hecho, las contras del equipo vasco era con bastante efectivos, lo que se traducía en llegadas con relativo peligro.

El partido adolecía de llegada por parte de los bercianos que no alcanzaban ni aproximarse a la zona de área visitante.

La Deportiva realizaba el primer cambio en el minuto ’65 Pol Llonch entraba por Leal. También el Sestao realizó cambios, pero no cambiaba la tónica del partido ya que el Sestao. Hasta ese momento, controlaba el partido con total tranquilidad. Ni un solo centro «bueno» al área visitante era el resultado de los primeros 75 minutos de partido.

Minuto ’77, primer córner de la segunda parte de la Ponferradina, lo que dejaba bien a las claras que el peligro de los bercianos en el área defensiva del Sestao brillaba por su ausencia.

Y a partir de aquí la tónica del juego berciano era la de los centros descontrolados al área del Sestao que poco peligro conseguían.

Pero en el minuto ’80 , tras el segundo córner de la segunda parte, y sexto del partido, era Dacosta, desde el borde del área, el que marcase un gol en el que el esférico se colaba por la escuadra del equipo del Sestao y suponía el empate de la Ponferradina.

Tras el gol, la situación cambió, ya que el Sestao, que se veía con los tres puntos, ahora tenía miedo a perder el que le quedaba. Y más cuando Lancho al larguero y Borja Valle al palo tenían en la misma jugada dos oportunidades infructuosas, cuando el Toralín cantaba ya el segundo del equipo berciano.

En el descuento, el cuarto córner de la segunda parte, octavo del partido fue la última oportunidad del equipo berciano, pero no acabo en resultado positivo.

Resumen: 80 minutos durmiendo la Ponferradina frente a un Sestao muy alegre en el juego hasta que recibió el empate. 10 minutos de juego berciano fueron insuficientes para conseguir la victoria.