APUNTES NOSTÁLGICOS (Embalse de Bárcena)
Mañana se celebrará la VIII Fiesta romera, tras recuperarse por iniciativa de antiguos habitantes y descendientes de los dos pueblos sumergidos por la construcción – en el año 1.956 – del Pantano de Bárcena. Esta cita lúdico-festiva-religiosa se halla bajo la advocación de San Roque y Santa María Magdalena y estos son trasladados hasta la orilla (del lado de Cubillos) del Embalse en carros engalanados, tirados por una pareja de bueyes. Ahí precisamente se procede a lanzar pétalos en memoria de las localidades “enterradas” y cubiertas por el líquido elemento y se cumple seguidamente con la costumbre cristiana de otorgar las oportunas bendiciones.
Los dos núcleos desaparecidos bajo las aguas, definitivamente el 31 de diciembre de 1.958, eran Bárcena y Posada del Río. Entre ambos se afectó a una población o censo próximo a los 500 moradores. Y, en este hilo de recuerdos ya algo lejanos, cabe aludir a la situación estratégica de ambas poblaciones así como el paso por el Puente (de la etapa o edad histórica moderna, avalada por su ubicación en el Camino del Rey Carlos III), esto último que lograría alcanzar un cierto desarrollo y uso viario.
Se afirma que por el centro de ambos lugares (Posada y Bárcena del Río) discurriría el Viejo Camino de Santiago (el que procedía de Bilbao, dese Igüeña cruzaba el Bierzo Alto en dirección Congosto-Cubillos, al objeto de confluir y coincidir con el actual Camino Francés). Otra denominación de este itinerario era el Camino Olvidado, en calidad de una de las llamadas “Rutas de Montaña”.
Mas, desde una preocupación que hemos manifestado infinidad de veces, nos permitimos reiterar nuestra aspiración: disponer de una barcaza que uniera “ambos bordes”, a imitación de la función que desempeñaba el Puente del Camino Real (ver imágenes). Este transporte revitalizaría un eje de comunicación, que fue indispensable a fin de ligar el Bierzo Alto con el Bajo y Central. Asimismo serían posibles desviaciones a los efectos de concebir y habilitar Rutas de Enoturismo, e incluso se podría contemplar en cuanto a desvío que volvería a integrarse en el “Camino de las Estrellas” justamente en la jacobea Villafranca del Bierzo.
Marcelino B. Taboada