Siguen los problemas en VOX León mientras Carlos Portomeñe sigue aferrado a su cargo con uñas y dientes.

Tras dimitir Carlos Portomeñe como presidente de VOX León, provocando así el cese de la junta directiva y, de esta manera, “cargarse” a todos los que estaban en su contra, el pasado 6 de febrero se presentó una gestora con todos afines a Portomeñe, elegidos a dedo, tanto que la nueva secretaria se afilió al partido solo un día antes del nombramiento.

Como ya eran pocos los afiliados que están en contra de las gestiones de Portomeñe, ahora se juntan dos vocales de la nueva gestora que dimiten “por discrepancias con la dirección”. Tan solo un mes han durado los vocales Óscar Ramos e Iván Franco ¿Qué habrán visto para durar tan poco tiempo?

Ya no se puede decir que haya división dentro de VOX León: más bien se resume en Carlos Portomeñe contra todos, sin comprender que el problema va a ser él mismo y no el resto.

Carlos Portomeñe trabajando en una sede que, asegura, nunca existió. Foto: Fabián Márquez

El Bierzo: estampida de afiliados

Y mientras tanto, el partido en El Bierzo sigue completamente roto y con enfrentamientos entre los militantes debido al mal estar generado por el presidente. Lejos de importarle lo más mínimo la comarca, sólo le importa las conversaciones con Fátima López Placer, aprovechando, por ejemplo, viajes a Galicia para parar a charlar un rato con ella a la vuelta. El resto de los afiliados sigue sin importarle lo más mínimo, demostrando una vez más que solo los quiere para pagar una sede en Ponferrada porque, ahora sí, como León ya tiene sede Ponferrada ya puede tenerla, como así advirtió siempre el presidente: “no puede ser que Ponferrada tenga sede antes que León”. Además, el descontento de los pocos afiliados que quedan en El Bierzo sigue en aumento ya que lleva meses asegurando que, en breve, habrá una reunión con afiliados y simpatizantes, pero eso sigue sin suceder.

Mientras tanto, Fátima sigue trabajando en realizar una candidatura al margen de los afiliados, trabajando estrechamente con una vendedora de seguros de la ciudad.