Desarticulada una organización que adquiría entradas para espectáculos públicos con tarjetas de crédito falsas
Los arrestados utilizaban unas 300 tarjetas, cuyas numeraciones habrían comprado a hackers a través de la Red
Con estas tarjetas fraudulentas adquirían entradas para conciertos, Fórmula 1 y principalmente para partidos de fútbol, para los que llegaron a comprar en un solo encuentro entradas por un valor de 12.000 euros
Agentes de la Policía Nacional han desarticulado un entramado que adquiría con tarjetas de crédito falsificadas entradas para espectáculos públicos como conciertos, Fórmula 1 y, principalmente, partidos de fútbol. Han sido detenidas 21 personas en Barcelona, Madrid, Guadalajara y Sevilla. Las numeraciones de las tarjetas con las que estafaban, en total se han detectado unas 300, las compraban a hackers a través de la Red. Con estas tarjetas llegaron a comprar entradas por un valor de 12.000 euros para un solo partido. Las entradas eran revendidas incluso en packs, con transporte en clase preferente al lugar del evento y billetes también adquiridos con las tarjetas falsas. En los registros realizados en nueve domicilios y en dos fincas rústicas de Madrid y Barcelona se han incautado 100.000 euros en efectivo.
Organización multidelincuencial
La investigación comenzó a principios de 2013, cuando la Policía tuvo conocimiento de la existencia de una organización criminal procedente de Europa del Este que, al parecer, se dedicaba a extorsionar a prostitutas de su misma procedencia en Francia. Estaban afincados en Barcelona, donde también disponían de un grupo de mujeres dedicado a la comisión de pequeños hurtos en las principales zonas comerciales. Los efectos que sustraían eran enviados a Rusia para su posterior venta en mercadillos ambulantes.
A medida que las investigaciones fueron avanzando, los agentes averiguaron que la organización había diversificado su actividad criminal, dedicándose además a la comisión de otros delitos, especialmente a la defraudación mediante tarjetas bancarias. Las pesquisas desvelaron que la red compraba las numeraciones de las tarjetas, emitidas en su mayoría por entidades bancarias australianas, a través de páginas web dedicadas al mercado negro de medios de pago y controladas por hackers.
Billetes y compras a bordo
Con estas tarjetas fraudulentas adquirían billetes de avión a través de Internet escasas horas antes de la salida del vuelo. Además, durante los trayectos realizaban compras a bordo utilizando las tarjetas de crédito falsificadas. Sin embargo, la actividad delictiva que más ganancias le reportaba a la organización era la adquisición de entradas para espectáculos públicos, principalmente para partidos de fútbol, para su posterior reventa. Las entradas, compradas con tarjetas falsas, eran ofrecidas en la reventa utilizando para ello a ciudadanos españoles. Se estima que la rama española de la organización dedicada a la reventa podría haber obtener cerca de un millón de euros anuales.
La red llegó incluso a desplazarse a la localidad en la que se celebraba cada partido de fútbol, contactando allí directamente con la correspondiente red de reventas. También era la organización de Europa del Este la que se encargaba de organizar los desplazamientos ofreciendo a los compradores un pack compuesto por las entradas más billete de tren, en clase preferente, gastos que también eran cargados a las tarjetas de crédito fraudulentas.
Finalmente, los investigadores consiguieron identificar, localizar y detener a 21 personas pertenecientes a la red investigada en Barcelona (3), Tarrasa (7), Badalona (3), Mollet del Vallés (1), Madrid (2), Guadalajara (3) y Sevilla (2). Además se han realizado registros en domicilios de Barcelona, Badalona, Tarrasa y Mollet del Vallés, y en una vivienda y dos fincas rústicas en Alcalá de Henares. En dichos registros se han intervenido 100.000 euros en efectivo, entradas para diferentes eventos deportivos por valor de 9.000 euros, más de 50 tarjetas de crédito, un cultivo de marihuana, dos pistolas simuladas, más de 40 teléfonos móviles, más de 100 tarjetas SIM de diferentes compañías, diez ordenadores, multitud de dispositivos de almacenamiento de memoria, joyas, prendas de vestir, perfumes y otros objetos de lujo adquiridos con tarjetas fraudulentas. Además, la Autoridad Judicial ha decretado el bloqueo de todas las posiciones bancarias de los imputados, así como el embargo de un inmueble y 19 vehículos.
En la operación policial han participado la Brigada Central contra la Trata de Seres Humanos de la Comisaría General de Extranjería y Fronteras, la Unidad Central de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF) y la Unidad de Investigación Tecnológica (UIT) de la Comisaría General de Policía Judicial, la Unidad de Guías Caninos de la Comisaría General de Seguridad Ciudadana, las Jefaturas Superiores de Policía de Cataluña, Andalucía Occidental y Comunidad Valenciana, la Comisaría de Tarrasa y la del Distrito de Arganzuela de la Jefatura Superior de Policía de Madrid.