El CEL muestra su rechazo al nuevo Estatuto del Becario
El CEL muestra su rechazo al nuevo Estatuto del Becario
El CEL se opone al Estatuto del Becario acordado por el Ministerio de Trabajo y los sindicatos
Ante el anuncio del acuerdo entre el Ministerio de Trabajo y los sindicatos sobre el Estatuto de las personas en formación práctica no laboral en el ámbito de la empresa, -más conocido como Estatuto del Becario-, el Círculo Empresarial Leonés se une al rechazo frontal manifestado por considerar que esta nueva norma perjudica y pone en peligro las prácticas extracurriculares de los estudiantes y carga a las empresas con nuevas obligaciones como el abono de los gastos en que incurran los becarios, restricciones en el número de horas, más burocracia y más pagos, como las cotizaciones sociales a las que tendrían derecho.
«Creemos que legislar “in extremis”, cuando están disueltas las Cortes, en periodo preelectoral y sin tener en cuenta la opinión de la comunidad educativa, de las universidades y empresas no responde al objetivo con el que a priori se ha redactado esta norma que es regular las condiciones laborales de los estudiantes en prácticas y atajar los abusos. Consideramos que las prácticas “formativas” no son una relación laboral al uso y los casos “fraudulentos” que se hayan podido detectar no se corresponden con la actuación de la inmensa mayoría de empresas que son responsables y cumplen con sus obligaciones cuando tienen becarios formándose en sus organizaciones».
«Si finalmente esta norma entra en vigor en octubre, se agudizará el problema de la escasez de prácticas formativas, no sólo de los estudiantes de grado sino también de los de Formación Profesional Dual que se apoya principalmente en la colaboración de las empresas. Será cada vez más difícil que el alumnado acceda a estancias formativas en empresas cuando son imprescindibles para su titulación y para garantizar su empleabilidad, algo que venimos exigiendo las organizaciones empresariales desde hace tiempo.
Por todo ello, pedimos una moratoria y que no se aplique este Estatuto del Becario por la oposición y las discrepancias que suscita en el seno de la comunidad educativa y del mundo empresarial.»