La oposición le rompe el saque al co-Gobierno
- Se aprueba por 16 votos contra 9 un listado de obras alternativo al propuesto por el Equipo de Gobierno del P.P.
- El Pleno volvió a girar en torno a las formas con mediación de la Secretaria en varios momentos.
- La Alcaldesa, que pierde así cierta iniciativa, calificó la jugada de estar hecha «a sus espaldas».
Mañana del 28 de septiembre, Pleno municipal. El orden del día tiene un punto de primera importancia: someter a votación el listado de obras con el que la Alcaldía quiere dar salida a los 3 millones de euros del remanente. Antes de que comience dicho debate, Miguel Ángel Fernández, de Ponferrada en Común, se pone en pie y anuncia que presenta una enmienda a la totalidad que, pronto se sabrá, cuenta con el apoyo de todos los grupos de la oposición. El Pleno, que apuntaba a ser una votación perdida por parte del Equipo de Gobierno del P.P. y sus socios de Coalición por El Bierzo, Iván Alonso y Pedro Muñoz, se torna en algo diferente aún por determinar debido a que la interpretación técnica de la Secretaria será necesaria para saber cómo y de qué modo ha de aceptarse (o no) y votarse (o no) la enmienda; incluso, si es o no una enmienda propiamente dicha.
La primera cuestión formal a dirimir es si la enmienda ha de aceptarse automáticamente o es algo que tiene que votarse. Al ser Miguel Ángel Fernández quien la presenta, siendo éste un concejal que no ha estado presente en la comisión anterior al Pleno, la enmienda a la totalidad, dicta el reglamento ha de ser admitida para que se someta a votación, como así terminará haciendo la Alcaldesa; «por imperativo legal», profirió la regidora indicando que quería que dicha expresión constara en acta.
La jugada de la oposición, preparada «a espaldas del Equipo de Gobierno» (dijo espontáneamente Gloria Fernández despertando un runrún entre los asistentes con dicha sentencia), conlleva, pues, inevitablemente a una votación sobre un plan de obras en la ciudad diferente al plan de Merayo que, de aprobarse, apartará del Orden del día la lista de inversiones de la Alcaldesa.
El portavoz de Ponferrada en Común, Miguel Ángel Fernández, ha sido el primero en intervenir en defensa de la enmienda a la totalidad. En las aclaraciones técnicas previas, dedicadas a la si se tenía que votar la admisión de la enmienda o había de pasarse directamente a su votación, había salido el tema del cronograma con el que la Alcaldía había ilustrado el proceso que se avenía tras el Pleno (y las modificaciones que sufriría el mismo, de aprobarse la enmienda). Fernández negó que la aprobación de la enmienda supusiera una imposibilidad material de que procesar burocráticamente la decisión plenaria fuera esta cual fuera. «Las fichas [de las obras propuestas por la Alcaldesa] se elaboraron en una semana», dijo el portavoz de Ponferrada en Común en referencia a los escritos que deben acompañar a las propuestas de inversión para presentarlas en primer término como «financieramente sostenibles», dando a entender que en su opinión es perfectamente posible preparar la documentación nueva necesaria antes del fin de 2018 para el listado de obras hoy aprobado. «Sí se puede», diría Rosa Luna, de Ciudadanos, ilustrando la inusitada sintonía entre los grupos de la oposición.
La política hace extraños compañeros de cama, pero no extraños por poco conocidos -tal y como sería el caso de Samuel Folgueral y Olegario Ramón en esta mañana-. El dirigente de U.S.E., formación nacida tras la expulsión del P.S.O.E. de Folgueral y sus colaboradores cercanos, y el actual líder de los socialistas votaron juntos esta vez no «contra» el P.P. sino a favor de un plan de inversiones en cuya preparación han colaborado. Con ellos y con Tarsicio Carballo, del Partido Regionalista de El Bierzo, Ciudadanos y la izquierda de Miguel Ángel Fernández («Ponferrada en Común») fueron cinco, las 5 formaciones de la oposición, quienes conformarían una mayoría de 16 que hizo a Pedro Muñoz, concejal de Medio Rural, moverse «entre el pasmo y el asombro».
Las formas y los tiempos centran el debate
El principal reproche del P.P. ha sido el relativo a las formas y los tiempos. Ricardo Miranda, portavoz del grupo político de la Alcaldesa, ha dicho sentirse engañado por personas «que ayer me miraron a la cara» ocultándole lo que hoy estaba preparado que iba a ocurrir. Miranda ha enumerado reuniones, conatos de negociación, intentos de comunicación frustrados y consumados… «¿por qué siguieron reuniéndose con nosotros?» ha preguntado cuando, haciendo cálculos, ha concluido que la enmienda de hoy ya estaba en marcha mientras los grupos de la oposición seguían sentándose a la mesa para pactar las inversiones con el gobierno municipal. Los tiempos, que venían ya en la agenda desde que ayer la Alcaldesa tasase lo afilado de los plazos cronológicos para cerrar contrataciones en el año en curso, también fueron reproches que el gobierno, ahora en minoría, lanzó a la oposición, ahora triunfante: «¡Esperan al 28 de septiembre para presentar su alternativa!», dijo Miranda a la oposición en general, a la que acusó de faltar al respeto a la Alcaldesa y al Equipo de Gobierno: «nos están engañando continuamente», afirmó.
Samuel Folgueral no vio ninguna diferencia en las dificultades de temporización del proyecto de la Alcaldesa, ahora rechazado, y la enmienda finalmente aprobada. «No está garantizado que se resuelvan los 3 millones» con ninguna de las dos, dio a entender; pero negó que la nueva lista sea inviable ya que «del mismo modo que aceptaron» las propuestas de U.S.E. en el plan anterior, «estudien el encaje de la enmienda» propuso al Equipo de Gobierno, señalando el camino que Gloria Fernández Merayo y los suyos tienen por delante: pueden hacer obras, sí: las que les dicta la oposición; y sólo si son diligentes con los trámites.
Esta paradoja la verbalizó Pedro Muñoz, no sin disgusto. «Abandone toda esperanza, Señora Alcaldesa» dijo ya en su primera intervención tras entrever la aritmética del 16 versus 9 que se acabaría imponiendo. Muñoz dijo ser proclive a siempre «ceder ante una mayoría -si es legal» pero instó a la Alcaldesa a no permitir que le marquen los tiempos. Olegario Ramón fue el blanco de sus primeras críticas. Para el concejal de Medio Rural, es incoherente lo hecho por el socialista, quien, según Muñoz, «se queja de que durante 3 años y medio no se le ha dado información»: «ahora me entrega un papel hoy aquí», dijo de Ramón en referencia al texto de la enmienda.
Muñoz ironizó sobre la «nueva forma de gobierno» en la que no es la Alcaldía quien propone y la oposición fiscaliza sino que son «16 que no quieren gobernar pero dicen qué obras tenemos o no que hacer» e incluso «cuándo se tienen que reunir». El portavoz de Coalición por El Bierzo no ha reprimido su cabreo y ha terminado diciéndole a los componentes de la oposición «son Ustedes deleznables».
Rosa Luna dijo no querer entrar a valorar las declaraciones de Pedro Muñoz, quien además había particularizado en ella diciendo que «no era interesante», y dirigió sus críticas hacia la, a su entender, poca capacidad negociadora de Merayo y su equipo. Luna insistió en que Ciudadanos había presentado numerosas sugerencias de inversión en obras a la Alcaldía y que por esa poca capacidad negociadora «esto es lo que pasa» (en referencia a la enmienda a la totalidad).
Olegario Ramón, del P.S.O.E. y Miguel Ángel Fernández fueron los que más alusión hicieron al nuevo plan. Desde la izquierda se dijo que la modificación del objetivo de las inversiones planeadas era beneficioso para la ciudad ya que el consenso de los grupos de la oposición se lograba en torno a obras que respondían a «las necesidad de los ciudadanos». El listado de obras tiene sus grandes montos en e plan de accesibilidad, la renovación de abastecimientos de agua (para sustituir materiales contaminantes del mismo) y planes de pavimentación (algunos cercanos a infraestructuras sanitarias como el Hospital Comarcal o el Centro de Salud III). Para la izquierda, actualmente en la oposición, son obras con poca repercusión mediática que no iba a acometer el gobierno municipal pero que son de indudable importancia.
La Alcaldesa de Ponferrada, Gloria F. Merayo, ha visto cómo se le volvía en contra el pleno por ella misma convocado. «No me parece mal que haya obras alternativas» dijo, para empezar, conciliadora; pero, añadió, «esto podía haberse hecho antes». Para la regidora, la jugada política de la oposición se llevó a cabo «a escondidas […] como maniobra porque como les daba vergüenza votar “no”» al plan que ella proponía «se sacan esto de la manga». La jefa del Consistorio ponferradino rememoró los diversos momentos en los que pidió, hasta el punto, dijo de pensar en utilizar la forma del requerimiento, al resto de grupos por «sus obras» «para sacar una lista» conjunta. Merayo destacó de la nueva lista que se excluya la Avenida Gómez Núñez y se lamentó de que «ya no hay tiempo». «Ustedes pretenden que ahora la culpa [en caso de que no haya inversión en obras] sea del Equipo de Gobierno», dijo a la oposición en el Pleno la dirigente municipal de la capital berciana.
«Por cegar a este gobierno […] echan abajo las inversiones para todos los vecinos de Ponferrada», dijo la responsable política que ahora deberá hacer frente al plan de obras dictado por el Pleno (con los votos en contra de los dos partidos que sostienen el co-Gobierno) y que su equipo tendrá que poner en marcha a contrarreloj. Gloria Fernñandez Merayo, que desde que se votó en contra de su proyecto de presupuestos se ha lamentado de que la acción de la oposición no le permitía iniciar inversiones, podrá (si cumple unos plazos casi imposibles) hacer obras… pero no elegirlas.