La policía tiene que acceder a una vivienda para socorrer a una persona herida que se había encerrado
La pasada madrugada del sábado al domingo día 19, agentes de la Policía Municipal intervinieron con un varón que se encontraba en el portal de su vivienda con un fuerte corte en la pierna y sangrando abundantemente.
El portal tenía roto el cristal y el suelo estaba lleno de sangre.
Se le hacen requerimientos por parte de los agentes, para que abra el portal e intentar auxiliarlo. El requerido hace caso omiso, introduciéndose en el ascensor hacia su vivienda, encerrándose en ella.
Se consigue acceder al portal, y subiendo a su piso, se le requiere nuevamente que nos abra dada la situación en que se encontraba esta persona.
Ante la gravedad de la situación, se decide avisar a los servicios de bomberos y sanitarios para acceder a la vivienda y que sea atendido.
Finalmente, se consigue acceder a la vivienda, forzando la puerta de la misma, comprobando que toda la vivienda está con restos de sangre
y el varón encerrado en una habitación.
Se fuerza, también, la puerta de la habitación donde se encontraba el varón, teniendo los agentes que reducirle, puesto que no respondía a ningún requerimiento o llamada de atención, al encontrarse en un estado de enajenación total.
Se consigue controlar la situación, haciendo uso de la mínima fuerza imprescindible para que los servicios sanitarios le practiquen los primeros auxilios y su posterior traslado al centro sanitario.
Esta persona ha sido diagnosticada como paciente que sufre una esquizofrenia paranoide.