Morala reclama al alcalde que abandone los subterfugios y asuma su responsabilidad al conculcar los derechos fundamentales de la oposición
El Portavoz del Grupo Municipal Popular en el Ayuntamiento de Ponferrada, Marco Morala, recuerda al alcalde, que algo de Derecho sabrá por su condición de Licenciado y por su ocupación profesional, que va más camino de medalla de oro que de bronce en la conculcación de derechos constitucionales. “En cualquier caso, la más pobre explicación posible es que sea medallista olímpico en una disciplina tan reprobable como conculcar derechos, quien tendría la obligación de garantizárselos a todos los ponferradinos. Entrando en el triste club de los conculcadores de derechos constitucionales, lo de menos es quedar primero o último; lo bochornoso es estar ahí”.
Al terminar el pleno del viernes, seguramente tocado por haber perdido su primera votación, la de la ley Celaá, y evitando cualquier réplica, en el peor estilo democrático, trató de minimizar el efecto de la condena al actual equipo de gobierno amparándose en otros precedentes en el Ayuntamiento. Sabemos todos la enorme diferencia que hay entre unos casos y otros. En cualquier caso, quedan dos constataciones: una, es que se acoge a la fácil fórmula del “y otros más” porque no puede decir “y yo no” a entrar en el grupo de los alcaldes españoles a los que se les reprocha conculcar derechos fundamentales. La otra, que se le ha quebrado la aspiración de ser como algún antecedente de su partido en la alcaldía. Ya no podrá alardear más de ser la alternativa fiable.
Olegario Ramón ha creado dos bloques de alcaldes democráticos, los condenados por conculcar derechos fundamentales y el de los restantes alcaldes. Los jueces del TSJCYL le han condenado y él solito ha corrido a incluirse al final del pleno en el primero de los bloques. Se encontrará a gusto con quienes él mismo incluyó ahí.
En el punto del TUP dijo a Morala: “usted deme los datos, que yo le diré la verdad”. Ahora le decimos: “usted deme las sentencias, que yo le diré la verdad”. A ver si tenemos más suerte y transparencia que con la información sobre por qué han incrementado el valor de una parcela de Pongesur y sobre la consulta vinculante a la AEAT de la obligación de pagar IVA por la disolución de Pongesur, que ya es la tercera vez que se pide y hasta hoy.