A pesar de perder, el C. B. Bembibre P. D. M. ya ha conseguido mantenerse en la máxima categoría para la disputa de la próxima temporada.

Gracias a que el C. R. E. F. ¡Hola! madrileño también resultó derrotado, las bembibrenses salieron a contender con las lógicas ganas de mejorar posiciones y prestaciones (al igual que sus adversarias).

La realidad es que, debido a consideraciones y circunstancias varias, las “rojillas” se hallan en horas bajas y han encadenado otra vez una serie de fracasos consecutivos (tres, en este caso).

De todos modos, hay que diferenciar entre dos fases distintas en el rendimiento de las foráneas: una primera mitad, en la que fueron superadas claramente por sus oponentes; y la segunda, en que se repusieron y acortaron sin llegar a voltear el marcador.

El encuentro empezó de forma halagüeña para las visitantes, ya que un triple de la base serbia Aleksandra Stanacev inauguraba las alteraciones en el luminoso. Mas esto no fue más que un espejismo, que pronto se reveló inexacto en cuanto al rumbo del juego: las riojanas, a continuación, lograrían 7 puntos seguidos, puesto que las chicas de Fran García cometían excesivos errores. Aún así, la franquicia estadounidense de las visitantes -Ariel J. Edwards, apoyada por alguna compañera- alcanzaría a poner las tablas en el electrónico (9-9). Esto no duró ya que sendos encestes de Parks y Laura Herrera retornarían a plasmar una cierta ventaja. Incluso el parcial se ampliaría, tras otra canasta de la escolta norteamericana Parks (que sumaría 8 puntos en este período).

Respondieron las rivales con un acierto de Vega Gimeno (la mejor de su equipo) pero un 2+1 de María España reestableció el desequilibrio. Total, se terminó este intervalo con un ilustrativo 18 a 13.

El siguiente acto parecía mostrar una reacción notable de las jugadoras de la Villa del Boeza: coincidió precisamente a los prolongados instantes en que la capitana Monty y la internacional Gimeno se conjuraron al objeto de reducir su atraso. Apretarían los números reflejados en el tanteador. Y, justo en este momento, surgió la figura resaltable de Knight (acumulando diez puntos en su casillero en este lapso temporal) y completando un apreciable parcial de 6 a 0. Solamente se opuso, después, a esta buena actuación local la siempre presente “Joy” Edwards (con un ensayo atinado desde el exterior). Entonces entraría en pista Parks y aportó un triple. Con una bandeja de Romeo el diferencial a favor de las riojanas se elevaría a los dos dígitos. La racha se iría a un expresivo 13 a 0, con la mejor efectividad transitoria de las anfitrionas: un lanzamiento preciso de Parks remataba la faena. No obstante, un enceste desde más allá del 6,75 colocaba un 39 a 25 concluyente (antes del intermedio).

Una vez consumado el paso preceptivo por los vestuarios, el choque semejaba romperse y las logroñesas poner tierra de por medio. Mas no fue tan sencillo ni previsible. La lesión de “Monty” no repercutió tanto como lo esperado, a causa de su sustitución -en plan principal- por la levantina Vega Gimeno. Esta anotaría dos canastas desde fuera del perímetro y acortaría la desventaja de las del Bierzo Alto. Sin embargo, reapareció la estelar Knight y, proporcionando tres canastas de dos puntos a las “blanquillas”, situaría el marcador en parámetros más diáfanos: 45-31. En este espacio, penúltimo de la contienda, destacaría grandemente V. Gimeno (que obtuvo la mitad de sus puntos -11- en este cuarto. Por otra parte, el período se fue complementando con un triple -desde fuera de la pintura- de la susodicha Gimeno y, posteriormente, con un buen tiro de dos de Stewart (prácticamente agotado el tiempo de este penúltimo acto).

En la parte definitiva, las del Pajariel intentaron culminar una “machada” y metieron dos lanzamientos consecutivos. Aunque otros 5 tantos de Romeo – que se mostraría decisiva en los últimos instantes de la competencia- cortarían las ansias de sus contrincantes. El propósito de estas, asimismo, topaba con obstáculos insalvables: la superación del “bonus” en personales y el cansancio, fruto de la escasa disponibilidad de un banquillo con relevos insuficientes.

Un triple de Laura Arroyo ponía a las discípulas de Andreu Bou en una tesitura envidiable, con un adelanto de 12 puntos (68-56) a solamente 3 minutos de la conclusión. Y el epílogo se desarrolló como era aguardado y supuesto: el arrojo y coraje de Ariel Edwards, en papel protagonista, no influyó tanto en el sentido de que cambiase el guión.

En resumen, el 74-66 final evidencia lo sucedido. El encuentro se convirtió en la plasmación de deseos y anhelos de agradar, y los aficionados lo agradecieron aun no gozando de demasiadas excepcionales jugadas ni brillantes destellos.

CAMPUS PROMETE LF1 (74):

Paula Estebas (6), Nicole E. Romeo (16), Laura Herrera (9), Robyn L. Parks (18), Leslie F. Knight (17) -quinteto de partida-, Ana M. Begic (-), Juana M.ª Molina-Prados (-), María España (3), Laura Arroyo (3) y A. Jocelyn D. Stewart (2).

EMBUTIDOS PAJARIEL C. B. BEMBIBRE P. D. M. (66):

Dragana Svitlica (4), Aleksandra Stanacev (5), Brianna Jh. Banks (9), Vega Gimeno (22), Ariel J. Edwards (18) -cinco de comienzo-, Rita E. Montenegro (6), Itziar Germán (-), Ekaterina Fedorenkova (-) y Bineta Ndoye (2).

PARCIALES:

1^er. C (18-13), 2º C (21-12) ̶ 39-25, en el descanso ̶ , 3^er. C (17-21), 4º C (18-20).

LA CLAVE:

Uno de los determinantes de las vicisitudes observadas hay que relacionarlo con la cifra considerable de fallos en la entrega del balón: 19 veces, en lo que se refiere a las deportistas de Bembibre.

LAS M. V. P.s:

La que se adjudicó la valoración superior fue Leslie Faye Knight, mencionada anteriormente: 17 puntos en su haber particular, 10 rebotes recogidos y una asistencia suministrada, sumando 25 créditos en su global.

La máxima anotadora, en cambio, fue su contraria Vega Gimeno: su registro de 22 puntos atesorados, 9 rebotes capturados y una asistencia suministrada la consolidaron con una valoración individual de 23 puntos.